Entrevista del diari el Mundo a Joan Maria Sentís, coordinador de CCOO del sector públic, potser amb preguntes una mica ideològiques però amb comentaris d'interès.
Como las comparaciones son odiosas, la inseguridad laboral en tiempos de crisis en la empresa privada y determinadas afirmaciones patronales han regenerado el discurso de agravio de los funcionarios respecto al resto de los mortales. Se dice que tienen asegurados empleos fijos y mejoras salariales. Que la recesión, en resumen, no va con ellos porque dependen de recursos públicos.
Pregunta.- ¿Al ámbito del funcionariado le ha afectado la crisis económica?
Respuesta.- Hasta ahora, los trabajadores fijos no la notan, porque tienen el lugar de trabajo e incrementos salariales. Pero sí que afecta en lo que respecta a suplencias y al personal temporal o interino, que se puede recortar en función de que el Govern diga que hay problemas presupuestarios. Y ésa es la polémica en la que nos encontramos ahora. Hay otra afectación psicológica, pero que es importante, y es que en estas épocas se acentúa ese discurso de que sobran funcionarios y eso quema, y mucho, porque sólo falta que pidan fusilarnos. Es perverso.
P.- Pero no se ven muy afectados, entonces.
R.- Básicamente afecta a no cubrir bajas y vacantes de personal temporal. La parte que se olvida en todo esto es que eso afecta directamente al servicio público que se ofrece y seguro que ahora, en momento de crisis, es cuando hay más necesidad de dar una buena respuesta.
P.- Una de las críticas a los funcionarios es esa capacidad para mantener las mejoras salariales pese a que hay otros empleados que o bien son despedidos o bien han de sacrificar sus salarios, como en Seat.
R.- Lo del trabajo seguro sirve para todo, pero nadie tiene en cuenta que el salario en la Administración es más bajo que en la empresa privada y que cuando las empresas van bien, se pueden negociar mejoras por encima de la inflación, hecho que no sucede en el funcionariado. Nunca hemos visto el beneficio de las vacas gordas. El problema es que en situaciones como ésta, en el que conseguimos mejoras salariales, la lectura exterior es muy negativa y no nos atrevemos ni a publicitarlo. Hay funcionarios que no llegan a los mil euros netos mensuales. La media es baja, lo que pasa es que hay altos cargos.
P.- El presidente Montilla ya dejó caer que era posible que los funcionarios no consiguieran mejoras como las pasadas el próximo año.
R.- Nosotros nos tememos eso, pero formalmente lo sabremos en septiembre.
P.- ¿Estarían dispuestos a aceptar?
R.- No podemos decir nada, de momento, pero nos lo tendrían que argumentar muy bien. Nosotros no nos estamos cerrando en banda a prácticamente nada. Ahora, de entrada creo que no está justificado.
P.- Ustedes han puesto el grito en el cielo antes de tiempo ante un posible recorte del 3% de la plantilla de la Generalitat.
R.- Es cierto que todo es matizable, pero la verdad es que el Govern no nos ha dado una respuesta adecuada. Hay un acuerdo de gobierno que dice que se han de recortar las plazas vacantes un 3%. Hablan de vacantes, que es una plaza vacía, y eso para el Govern quiere decir que no se despide a ningún trabajador. Pero si es una plaza vacía lo que hay que hacer es cubrirla, porque puede ser la de un profesor o la de un médico y, además, según el lenguaje del funcionariado, puede que esa plaza no esté vacía y la ocupe un interino. Nos queremos asegurar de que ningún interino se va a casa.
P.- ¿Considerarían ese recorte como un ERE de la Generalitat?
R.- Ésa es la definición laboral a una eliminación colectiva de empleo. Cuando hay reestructuración hay que negociar o que lo expliquen. Es difícil explicar que sobran plazas o personas en un contexto en el que la ratio de empleados públicos por ciudadano es en España más bajo que en Europa y en Cataluña es de las más bajas del conjunto de España. Incluso Fomento del Trabajo, que hace poco hizo una diatriba del sector funcionarial, al final dijo que Cataluña estaba en la franja baja.
P.- Esa supuesta obsesión de los empresarios por los funcionarios, ¿a qué cree que viene?
R.- Es ideológica. Integra la teoría liberal que asume que todo lo que es función pública es un desastre. Además, el mundo empresarial considera todo lo que tiene que ver con el sector público como una oportunidad de negocio si se privatiza. Pero el servicio público no se puede mirar desde el punto de vista de negocio. Quizás tendrían que cerrar los hospitales, el servicio público de empleo�
P.- ¿Cuántos funcionarios hay en Cataluña?
R.- Alrededor de 150.000.Yo creo que tiene que haber más funcionarios, que es mejor estar al nivel de Suecia que no al de Grecia. El trabajador que se queda en paro y tiene que ir al Servei d'Ocupació de Catalunya, ha de hacer una colas impresionantes. Quizás es que faltan funcionarios. Si crece el paro y crece la tramitación de expedientes de paro, ¿no serán necesarios más trabajadores de atención? No creo que sobren funcionarios.
P.- ¿Ha crecido en los últimos años el número de funcionarios?
R.- No, no es verdad. Una de las cosas de las que ha hecho bandera el Govern es que se han creado muchas plazas de maestros, con oposiciones muy masivas... pero es que había plazas que ya existían y que estaban ocupadas por interinos. Lo que crece de una forma desmesurada son los cargos, mandos, asesores� Nos parece vergonzoso.
P.- Pero esa era una de las críticas de ERC en época de CiU.
R.- El poder... Es triste decirlo pero se ha elevado el número de altos cargos y muchos de ellos se han vestido en forma de directivos de empresa pública cuando tendrían que hacer de asesor. Y eso se hace muchas veces con la intención de, con la excusa de agilizar la gestión, saltarse el control administrativo.
P.- ¿Cómo se reparten, en porcentaje, los grupos del funcionariado?
R.- El 39% pertenecen al ámbito de la educación.
P.- Ésos son los que más reciben, ¿no? Tres meses de vacaciones, seis horas al día�
R.- Sí, y yo no les cambio el trabajo. Normalmente a los colectivos de trabajadores que, desde fuera, parecen tener condiciones ventajosas, no se les regala nada. Los maestros son los que tienen un mayor porcentaje de bajas por estrés y si endureciéramos sus condiciones ese porcentaje de bajas subiría. A mí, Dios no me ha nombrado funcionario. Cuesta un esfuerzo pasar una oposición. Si tan chollo es ser funcionario, que la gente se haga funcionario. Se ha de pasar una oposición, preséntese.
P.- ¿Hay enchufismo?
R.- En las oposiciones, no. La gente va con un código� en las contrataciones temporales hay bolsas que funcionan y podemos controlar y otras que cuesta más y pueden ser más sospechosas. Bueno, y en los cargos y en los asesores...
Cap comentari:
Publica un comentari a l'entrada